Tres pasos para encontrar la motivación al emprender cualquier actividad

La motivación es el motor esencial que conduce nuestras decisiones. En ocasiones la motivación parece estar perdida en algún lugar de nuestro espacio tiempo y encontrarla, se vuelve en un verdadero reto.

Muchas veces, creemos que, mediante la asistencia a una capacitación, mirando a un gran gurú de la motivación en YouTube, o leyendo un libro encontraremos la chispa de arranque.

Aunque hacer estas actividades no son algo malo en esencia, ya que pueden ayudarnos a encontrar ciertas pautas para empezar con algo, el problema está en que muchas veces las decisiones que se toman a partir de la emoción, se diluyen en el tiempo.

La motivación no está guardada en ese video en sí, tampoco en el libro, sino que en realidad se encuentra arraigada en nuestros deseos más profundos.

De hecho, la motivación como tal puede ser algo bueno o malo según como la encontremos cada uno y como la apliquemos.

Ahora bien, en el artículo acerca de cómo tomar el control de nuestros hábitos, hablamos acerca de cómo modificar ciertas actividades que realizamos a diario para que estas jueguen a nuestro favor.

La motivación nos ayudará a mantenernos firmes en trabajar por adquirir estos hábitos.

¿Ahora bien, cómo encontramos motivación?

• Encuentra el propósito para empezar algo.

Si logramos reconocer el por qué de lo que hacemos, si conocemos cuál es nuestra misión y si esta está estrechamente relacionada con nuestros anhelos y nuestras metas como seres humanos, lo más probable es que aquella meta que te hayas propuesto se cumpla.

Cuando hacemos algo que realmente anhelamos o lo queremos con pasión, los esfuerzos que implique para llegar al objetivo no serán una carga ya que todo esfuerzo y meta toma tiempo.

Así, cuando decidas que vas a participar en una carrera, y sientas que tu motivación es participar en ella, cuando compres las zapatillas y vayas a practicar a diario, lo harás hasta el final sin importar lo que esto implique, pero si tu motivación no está relacionada contigo, con tus propósitos, tus anhelos, lo más probable es que a la primera semana que empiezas, decidas retirarte.

• ¿Qué es eso que tanto te apasiona?

Para que tu motivación sea la adecuada, debe ser algo que harías incluso si no te pagan por ello. Para encontrar eso que te apasiona, podrías preguntarte ¿Que cosa harías ahora si el dinero no fuese un problema? Si encuentras una actividad una carrera u oficio alrededor de estar respuesta, puedes empezar por ahí.

• ¿Cuál es tu por qué?

El por qué es tu propósito, la razón por la que quieres hacer una actividad, es la esencia para arrancar tus proyectos. Por ejemplo:

¿Por qué quiero estudiar esa carrera?

¿Por qué quiero ser casarme?

¿Por qué quiero viajar?

¿Por qué quiero inscribirme a un gimnasio?

Si logras responder estas preguntas, lo más seguro es que puedas encontrar la motivación correcta para hacer cualquiera cosa, y lo más importante, emprenderás cualquier proyecto con pasión.

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